Hablamos mucho de la necesidad de proteger la piel del sol, pero ¿y el pelo? Proteger el cabello del sol es también una necesidad para mantenerlo con aspecto sano y bonito.
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Productos para proteger el pelo del sol
Recomendamos incluir la protección solar para el pelo en cualquier caso para prevenir que se dañe, pero especialmente aconsejamos su uso si tienes el cabello decolorado o teñido o ya dañado y en proceso de reparación. También es importante llevarlo en la maleta a lugares donde hay condiciones climáticas extremas y aplicarlo con mayor frecuencia en las actividades que realicemos en los meses de verano.
Además de los protectores solares formulados expresamente para el cabello, existen otros productos preparados para resguardar el pelo de los rayos del sol:
- Mascarillas y acondicionadores con protección UV: algunos productos para lavar el pelo, no solo lo hidratan sino que también le aportan un factor de protección ante el daño solar. Se trata de leer e informarnos en la etiqueta del frasco sobre si el producto incluye protección UV.
- Aceites para el cabello con factor de protección solar: asimismo, existen aceites que incluyen protección solar. Aconsejamos elegir un producto que tenga una fórmula ligera, para evitar que nos aporte brillo, nutrición y protección al sol sin dar un aspecto graso al cabello.
Protector solar en el cuero cabelludo
Definitivamente, en materia de protección solar, está todo inventado. Hasta el cuero cabelludo está cubierto, solo falta concienciarse sobre la importancia de no descuidar ninguna parte del cuerpo que sea vulnerable al sol. En farmacias, podemos encontrar protector para el cuero cabelludo en formato aerosol, polvo o loción. Además, algunos de los productos incluyen ingredientes que ayudan a hidratar y calmar la zona.
Toda prevención es poca ante el daño solar. En este caso, recomendamos cubrir la cabeza con sombreros o gorras, ayudan mucho a proteger, en este caso, el cuero cabelludo, ya que no deja de ser piel expuesta directamente al sol, muchas veces más expuesta que la piel de la cara y puede quemarse con facilidad si nos exponemos al sol de forma prolongada, sobre todo si tenemos el pelo fino o calvicie.