Los pies son los grandes olvidados del cuerpo, soportan el peso del mismo y no les damos la atención suficiente. A veces, sufren dolencias como los juanetes.

 

Tipos de juanetes

Hay diversas razones que pueden derivar en un juanete, la predisposición genética es una de ellas. También puede ser causa de una lesión en el pie o la artritis. Los juanetes pueden provocar enrojecimiento, dolor e irritación. Los más conocidos son los siguientes.

  • Hallux valgus: es el juanete típico, el cual se forma en el dedo gordo del pie. Se trata de una la desviación del hueso metatarsiano, lo que hace que el dedo gordo se desplace hacia el interior y que los huesos formen un bulto que sobresale hacia la parte interna del pie. En caso de sentir un dolor grave o ser incapaz de caminar con normalidad, se puede acudir a la opción de una cirugía mínimamente invasiva.
  • Bunionette: este tipo de juanetes son conocidos popularmente como juanetes de sastre. Es parecido al juanete típico, sin embargo, se forma en la base del dedo meñique del pie.
  • Hallux rigidus: tener este tipo de juanete implica sufrir rigidez en el dedo gordo del pie, lo que limita su movilidad. Este tipo de juanete puede aparecer por varias razones, como ser el fruto de una lesión, la artritis o el envejecimiento.
  • Juanete congénito: significa que el juanete está ahí desde pueden estar ahí desde que nacemos o, incluso, puede aparecer durante la niñez

 

Tratamiento para los juanetes

Si tratamos de forma temprana un juanete podemos evitar que empeore y cause más deformidad en el pie. En la farmacia podemos encontrar numerosos remedios para calmar el dolor y evitar que el problema crezca.

  • Correctores ortopédicos: éstos están diseñados para reparar la deformación que ha provocado el juanete.
  • Plantillas: sirven para reducir la presión sobre el juanete y aportar estabilidad al pie.
  • Protectores: son en forma de vendaje o banda y sirven para proteger el juanete de los roces y, además, reducir la presión.
  • Separadores de dedos: este mecanismo sirve para evitar que los dedos se superpongan entre sí. Pueden ayudar a reducir la irritación.
  • Analgésicos en crema: también se comercializan en formato gel y sirven para reducir la inflamación y el dolor en la zona del juanete.

Es necesario añadir que el uso de calzado adecuado es importante para un pie con juanetes. Tiene que ser calzado cómodo con suficiente espacio para los dedos, lo que ayudará a reducir la presión en el pie. Es preferible no llevar tacones ya que éstos hacen que se ejerza mucha presión en la parte delantera del pie. Por último, recomendamos que el calzado tenga una suela flexible, que permita que el pie se flexione con más libertad al caminar.

Se estima que, estadísticamente, sufrir de juanetes es más cosa de mujeres que de hombres, debido al calzado y la estructura ósea femeninos. El embarazo también influye, el cual provoca unos trastornos hormonales que pueden desgastar los ligamentos y provocar juanetes.