El cuidado de la piel es esencial para mantenerla saludable. Para aquellos que luchan contra el acné, encontrar la rutina adecuada para mejorar el aspecto de su piel puede ser un gran reto. En este artículo te traemos pasos y consejos esenciales para ayudar a crear tu rutina de skincare.

 

Paso 1: limpieza profunda

Comienza tu rutina con una limpieza suave, con un limpiador sin fragancia y con ingredientes suaves para no irritar la piel. Lávate el rostro dos veces al día, por la mañana y por la noche.

Paso 2: exfoliación controlada

La exfoliación es esencial para eliminar las células muertas de la piel y limpiar los poros. Busca un exfoliante con ácido salicílico, que es conocido por su capacidad para tratar el acné. No lo uses más de 2 o 3 veces por semana para evitar irritaciones.

Paso 3: hidratación

A pesar del acné, la hidratación no debe pasarse por alto. Te recomendamos utilizar una crema hidratante sin aceite para mantener el equilibrio de la piel. Es muy importante que uses productos no comedogénicos para evitar obstruir los poros.

Paso 4: tratamientos

Incorpora un tratamiento con ingredientes activos como el ácido glicólico o el peróxido de benzoilo. Estos ingredientes ayudan a reducir el acné y prevenir futuros brotes. No obstante, úsalos con precaución y siguiendo las indicaciones, ya que pueden ser agresivos para la piel sensible. El ácido glicólico es un exfoliante químico con múltiples beneficios, entre otras cosas, promueve la renovación celular de la piel, la producción de colágeno y destapa los poros, favoreciendo la desaparición del acné.

Paso 5: protección solar

Este paso es determinante en tu rutina. Utilizar productos como el ácido glicólico hace que tengas que tener mucho cuidado al sol. Siempre recomendamos el uso de un protector solar de amplio espectro con un factor de protección alto. Esto no solo protegerá tu piel del daño solar, sino que también evitará que las manchas de acné empeoren.

 

Como consejo extra, te recordamos que es importante evitar tocar tu rostro. Mantén tus manos alejadas de tu cara tanto como te sea posible, ya que con este mal hábito puedes transferir bacterias a tu cara y empeorar los brotes de acné. Por último, recuerda que la paciencia y la consistencia son claves para ver resultados, los cuales pueden no ser instantáneos, pero con paciencia y el seguimiento adecuado, verás mejoras en tu piel con el tiempo.

En la farmacia, puedes encontrar una amplia gama de productos recomendados para cada paso de esta rutina. Si tienes dudas, consulta al farmacéutico antes de realizar cambios importantes en tu rutina de cuidado de la piel, especialmente si estás utilizando otros tratamientos médicos.